martes, 22 de noviembre de 2011

La Cenicienta ( contada por una de sus hermanastras )

       




Queridos lectores, en esta última entrada he publicado el contenido de un viejo y polvoriento manuscrito que encontré el otro día en mi desván. Espero que les guste la historia, y si no es así ,les ruego que me lo  hagan saber.


P.D. : Señor Merlín , como comprobará su sabia persona, he introducido algunos cambios en la redacción de este documento para intentar mejorar la versión que usted amablemente me revisó. Espero que no los encuentre defectuosos.
 Un anónimo saludo :
                            Incógnita.




    Comencemos pues. Todos conoceis la  historia de la Cenicienta , ¿no? , pues bien,  para empezar , la historia que todo el mundo conoce es una enorme y ofensiva (para el resto de personajes que en ella intervenimos) farsa. Aquí , en este papel , yo (no voy a mencionar mi nombre , pues harta estoy de mensajes insultantes y amenazas ) voy a contar la verdadera historia de esa "pobre y ceniza muchacha " por todos bien conocida.
      Para  empezar , mi madre era una de las más bondadosas y honestas mujeres que pasaron  por este mundo . Siempre  era amable con todo el mundo , aunque con mi hermana y conmigo siempre fue muy estricta.Nos mudamos a casa de Mª Hermenegilda ( ¡SI! ese es su verdadero nombre aunque no me creais ) cuando yo tenía....em... , bueno , no lo recuerdo muy bien, pero.....¡Claro! ...... Bueno , resulta que yo tenía siete años por aquel entonces. Nos mudamos , como dije antes, a casa de..... bueno , de ella, Mª Hermenegilda por que mi madre se había casado con su padre , pues el nuestro había muerto hace poco dejándonos a las tres sin un duro y el le propuso matrimonio a mi madre, quien teniendo a dos hijas pequeñas, no pudo negarse ..........¡Donde hay necesidad....!en fin , que tiempos más tristes......
Volvamos a lo del padre de Mª Hermenegilda : ¡No me extraña que aquel ser horrible hubiese enviudado !
¡Si hasta un orco de Mordor podía pasar por una hermanita de la caridad al lado de aquel individuo! y lo mismo pasaba con la hija , pues ya se sabe que de tal palo.....
       Prosigamos. En los años que Madre ( que en paz descanse ), mi hermana y yo vivimos con aquellas infernales criaturas, Mª Hermenegilda solo se dirigía a nosotras para una cosa: tocarnos las narices.
¡Si señor! Como lo oyen ustedes : para tocarnos las narices. De esto me abstendré de hacer comentarios, pues como habrá la boca , podría estar hablando de ello hasta el día del Juicio Final.
    Bueno, al final resultó que aquel calvario nuestro llegó a su fin cuando nuestra "querida" hermanastra se casó con su "maravilloso"  principucho ; un apagado mancebo al que conoció en un baile real al que acudieron todas la damas del reino, de las cuales ÉL sólo fijó su real mirada sobre nuestra protagonista y bla...bla....bla... ( con esto pretendo poner fin a esta parte de la historia que ha sido idealizada hasta el extremo de convertirse en un cuento de hadas).
   Su boda tuvo para mis queridas madre y hermana junto conmigo desastrosas consecuencias , a pesar del prometedor futuro que teníamos ante nosotras ; sin padrastro (había muerto solo unos años antes de la boda), sin hermanastra .... y , sobre todo , con una jugosa herencia....¡para nosotras solas!
   Lo que ocurrió fue que , después de celebrarse la ceremonia, Mª Hermenegilda declaró a la prensa que desde la unión de nuestras dos familias, la habíamos maltratado sin piedad.
¡Pero será mentirosa la muy lianta !
 En fin, lo único que quiero añadir para concluir este verídico relato es que aquí solo figura la más pura verdad. Espero que mi versión de la historia pueda cambiar la opinión de alguna gente sobre ella.

6 comentarios:

  1. Señor o señorita Incógnita:
    En primer lugar, quería agradecerle su comentario en mi blog, tristemente falto de ellos.
    En segundo lugar, quería agradecerle también que, por fin, alguien nos cuente la verdad, y no esa patraña que llaman "Fantasía".
    E tercer lugar, quería que supiera que su redacción, no falta de incorrecciones (sin ánimo de ofender), tiene una calidad tal que los únicos adjetivos que encuentro para calificarla son sublime y magistral. Ha sido un auténtico placer leerla.
    En último lugar, como cabía esperar, despedirme de usted desde el más cordial tono. Espero que nuestros caminos se vuelvan a entrelazar alguna otra vez.
    Desde el anoimato,
    un compañero suyo.

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  2. En verdad me entusiasma escuchar palabras tan halagadoras , estimado e ilustre Sr. Pitagórico.Me alegra que sea usted , como yo , un entusiasta buscador de la verdad, pues en este mundo de ilusiones , mentiras y engaños uno ya no puede permitirse el privilegio de dar algo por sentado.
    En cuanto al tema de la escasez de comentarios que usted está sufriendo , por mi parte puede usted confiar en que estas no sean las últimas noticias que tiene usted de mi, se lo aseguro.
    Sinceramente anónima, su amiga (espero):
    Incógnita.

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  3. Hola Incógnita!
    Está claro que esta historia va a cambiar mi punto de vista sobre el cuento popular, sin duda alguna. Gracias, Incógnita, por saber reflejar tan bien ese punto que se encuentra entre lo maravilloso y lo de cuento de hadas en lo que es verdad. Es una total injusticia que se recuerde hasta tal punto de hacer de la historia de la hermanastra un cuento de hadas y a la narradora, que es a la que simplemente olvidamos a la hora de narrar este relato a nuestros hermanos, no se la recuerde o se le deje un sitio tan apartado. La verdad tiene que prevalecer ante todo y, como tú tan magistralmente sabes hacer aquí, renunciar a la vida de color de rosa y por fin afrontar la verdad desde un punto de vista de una hermana, si me lo permites, increíblemente angustiada y aturdida por el horroroso dolor de que se recuerde a su hermanastra por algo tan injusto, reclamando venganza a la desesperada y la verdad. Creo yo que este sería un excelente relato para contar a nuestros hermanos o hermanas para cuando ya sean un poquito mayores, para que sepan que el mundo no es como sale en las películas ni incluso como les dicen sus amigos ni algunos libros, sino que debe ser siempre real y verdadera, aunque a veces también quepa un cuento de hadas en el medio. Me encantó sobre todo la parte con la que comparas el padre de Mª Hermenegilda con un ogro de Mordor, que sería una hermanita de la caridad al lado de él. Muy bien Incógnita, sigue así de bien.
    Recuerdos desde mi mundo romántico.
    Tom

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  4. Sinceramente ,gracias otra vez a usted , Sr. Tom.
    Me parece que me empieza a enganchar de verdad el escribir en este blog , pues (no quiero sonar pretenciosa ni arrogante )no paran de lloverme comentarios tan agradables como el que acaba de dejarme usted o el del Ilustre Sr. Pitagórico.
    Quisiera añadir que me maravilló el poema que usted me dedicó en su blog : simplemente es precioso. Espero seguir recibiendo noticias suyas , y de las buenas.
    Un saludo cordial :
    Incógnita.

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  5. Hola Incógnita:
    Este es el segundo comentario que te dejo en esta entrada, espero que este se publique. No recuerdo muy bien lo que ponía en el primero pero iba sobre que me había encantado tu relato y que me había impactado saber la verdad sobre este cuento. Bueno, ahora envío este comentario, aunque me da un poco de pena porque comparado con los otros, es muy cutre. No lo puedo evitar, no sé usar tan bien el registro formal.
    Volveré a patinar por aquí pronto,
    Patines.

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  6. Bueno... Me he que dado sin palabras. Es preciosa. Me ha llamado mucho la atención.
    Por cierto bonito nombre el de "Cenicienta". Pero hay un nombre que la supera: Evarista!!
    Saludos estelares
    Yo.
    P.D. Cuando quieras pasate por mi blog

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